Software para el mantenimiento de iglesias

El facility management en centros de culto (o church building maintenance) es, como la misma expresión sugiere, el mantenimiento de edificios o estructuras religiosas.

Se tiende a pensar que el mantenimiento de una iglesia, o de una estructura religiosa en general, se limita a la reparación del tejado, la limpieza de las fachadas o la restauración y refuerzo de las bóvedas interiores.

Pero los centros de culto son edificios vivos y, por tanto, siguen utilizando equipos e instalaciones que sirven cocinas, baños, calefacción, etc. Todo ello requiere una gestión y un mantenimiento, tanto ordinarios como extraordinarios, y en eso consiste el mantenimiento del patrimonio religioso.

Al igual que ocurre con el mantenimiento de otras estructuras, existen tres enfoques posibles para la gestión de edificios religiosos:

• correctivo: consiste en actuar cuando el daño ya se ha manifestado.
• preventivo: consiste en el mantenimiento planificado y periódico para evitar que se produzcan daños o averías;
• predictivo: consiste en monitorear la estructura gracias a sensores o dispositivos específicos. Sobre la base de los datos recopilados a través de estos dispositivos, se evalúa si es necesario intervenir, en qué momento y de qué manera.

El objetivo final es garantizar que estos preciosos y fascinantes edificios también sean funcionales y seguros.

En el caso de los edificios religiosos, es posible definir una checklist para mantener el rendimiento de la estructura durante todo su ciclo de vida. Debe contener al menos los siguientes puntos:

• Cubierta:
  como ocurre con todos los edificios, incluidos los religiosos, mantener la cubierta en perfecto estado es crucial para la salud de toda la estructura. En el caso de estructuras religiosas antiguas y, por tanto, edificios patrimoniales, las cubiertas suelen ser elementos constructivos débiles que ya han sufrido de alguna manera el paso del tiempo, por lo que necesitan un mantenimiento cuidadoso y puntual para mantener todo el edificio protegido de las infiltraciones y agentes atmosféricos. La situación debe evaluarse caso por caso, pero en principio será útil prever el control de:
  • tejas;
  • cualquier elemento de la estratigrafía;
  • presencia de residuos acumulados;
  • presencia de animales o plantas;
  • corrosión de cualquier elemento metálico;
  • presencia de humedad en las vigas.
• Canalones y bajantes:
  los canalones y bajantes forman parte del sistema de evacuación de aguas y, a menudo, los problemas en su funcionamiento se detectan sólo cuando ya se han producido daños, a veces graves. Por este motivo, es fundamental realizar revisiones periódicas, con una frecuencia que también depende de la época del año, para asegurarse de que los canalones y bajantes no estén obstruidos y garanticen la perfecta evacuación del agua de lluvia.
• Muros:
  cuando estamos en presencia de centros de culto pertenecientes al patrimonio histórico arquitectónico, los muros son una de las partes del edificio que menos sufren reformas y, por tanto, más nos revelan las técnicas de construcción originales. A menudo presentan alteraciones, grietas y degradaciones que sufren, entre otras cosas, la acción de empuje de las cubiertas interiores. Mantener la integridad de estos elementos es absolutamente una prioridad, pero al hacerlo es probable que sea necesaria la colaboración de varias figuras profesionales: historiadores, expertos en historia del arte, estructuralistas, arquitectos. Un equipo multidisciplinar sabrá mantener tanto la seguridad como la identidad histórica del edificio.
• Ventanas y puertas:
  también en este caso, si se trata de patrimonio religioso, es probable que los marcos sean los originales de madera y vidrios decorados, por lo que un mantenimiento cuidadoso significa preservar estos pequeños tesoros arquitectónicos a lo largo del tiempo. Para su mantenimiento será útil comprobar:
  • el funcionamiento del sistema de apertura y cierre;
  • la posible presencia de condensación, infiltraciones y humedad;
  • el estado de la madera y la posible presencia de xilófagos;
  • el estado de las partes metálicas;
  • el correcto funcionamiento de las puertas contra incendios.
• Equipos e instalaciones:
  Los centros de culto son edificios vivos y practicados y por este motivo se sirven también de equipos e instalaciones eléctricas, hidráulicas y de climatización. Por lo tanto, será esencial llevar a cabo un mantenimiento regular de todas las partes de las instalaciones para que sigan siendo seguras y funcionales.
• Pertinencias externas:
  No es raro que las iglesias estén rodeadas de terrenos de propiedad que es necesario incluir en los checkpoints. El mantenimiento de los espacios exteriores incluye:
  • mantener los senderos limpios y seguros;
  • cuidado de plantas y árboles;
  • cortar las ramas que obstruyan los recorridos;
  • controlar el correcto flujo de las aguas;
  • comprobar el estado de las eventuales estatuas;
  • mantener la seguridad de las plazas de aparcamiento.
• Mobiliario:
  Para mantener la estructura religiosa utilizable en total seguridad y funcionalidad, será útil añadir a la checklist la verificación de todo el mobiliario de la iglesia que sea funcional para su uso Comprobar el estado de los bancos, por ejemplo, y evitar la presencia de astillas de madera, podría ser uno de los checkpoints.

Las estructuras religiosas son edificios sometidos a grandes flujos de personas y a un grado equivalente de desgaste. Por estas razones, es muy importante que su gestión y mantenimiento se lleve a cabo con el mayor cuidado posible, estudiando bien cuándo intervenir y todas las partes del edificio que se deban monitorizar. El objetivo es mantener la originalidad, la utilidad y la seguridad de estos edificios.

A menudo, se trata de edificios de gran tamaño, pero sobre todo de construcciones peculiares, tanto desde el punto de vista arquitectónico como histórico. Por estas razones, es necesario que el mantenimiento se gestione mediante un plan preciso que tenga en cuenta todos los aspectos de estas valiosas estructuras del patrimonio construido.